Introducción
Por lo general, las personas obtienen su seguro de salud a través de su trabajo. Pero si dejan su trabajo por cualquier motivo, esa cobertura puede desaparecer. La mayoría de los empleadores también ofrecen a sus empleados la posibilidad de comprar un seguro de vida, pero lo habitual es que este seguro solamente cubra al empleado y sea una cantidad modesta. Hay dos problemas con esto: no toma en cuenta al resto de los miembros de tu familia o tus necesidades únicas, y las personas olvidan que esta cobertura de seguro de vida también puede estar vinculada a ese empleador. De modo que si dejas o pierdes ese trabajo, puedes quedarte sin cobertura.
¿Por qué necesitamos un seguro de vida?
Creemos que el seguro de vida es una parte fundamental de un plan financiero sólido. A menudo se dice que no compramos un seguro de vida para "nosotros", sino que lo compramos para 'ellos', es decir, nuestra familia. Esto es especialmente cierto si tus seres queridos dependen de tu apoyo financiero para su sustento.
Desafortunadamente, comprar un seguro de vida puede ser una de esas cosas que posponemos por varias razones: hasta que nos casemos, hasta que tengamos hijos, hasta que podamos pagarlo. Sin embargo, puedes estar dejando a tus seres queridos sin la protección financiera adecuada si llegas a morir. El seguro de vida nunca será más asequible que ahora, pues el costo lo determina tu edad y posiblemente tu salud al momento de adquirirlo. Ninguno de nosotros se hace más joven y no podemos predecir qué nos depara el futuro en términos de nuestra salud.
Definir la necesidad de un seguro de vida
La cobertura de seguro de vida generalmente atiende cuatro necesidades básicas:
Gastos finales:
Cuando mueres, tus seres queridos asumen la carga no solo de los costos del funeral y el sepelio, sino también de cualquier deuda médica u otra deuda pendiente en la que hayas incurrido. Una póliza para cubrir los gastos finales ayuda a asegurar que tu familia pueda llevar su luto sin preocupaciones financieras adicionales.
Sustitución del ingreso:
Una póliza de seguro de vida que ayuda a sustituir las percepciones de ingresos por un periodo de tiempo y le permite a tu familia adaptarse a la vida sin tu ingreso.
Protección hipotecaria:
Para la mayoría de las familias, la hipoteca es, con mucho, el mayor gasto que deben pagar cada mes. ¿Podría tu familia conservar la casa si tú no estás allí para pagar la hipoteca?
Educación:
Depositamos nuestras esperanzas y sueños en nuestros hijos. Tener una cobertura de seguro de vida con una cantidad monetaria adecuada puede ayudar a garantizar que haya dinero para sus necesidades educativas.
Conclusión
La mayoría de las familias necesitan más seguro de vida que el que normalmente se ofrece a través del empleo. No esperes a quedarte sin esa protección. Tu planificador financiero o agente de seguros con licencia puede orientarte con los tipos de cobertura que mejor se adaptan a las necesidades y el presupuesto de tu familia.
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